Desde el momento que entras por la puerta ya se nota que es un concepto de clínica distinto. Hacen que no sea una tortura ir a dentista, al contrario! Es todo agradable: la sala de espera, todo cuidado al mínimo detalle, la atención que recibes, y la Dra. Ferrer quien me trató, consiguió en tiempo récord dejarme unos dientes geniales. No paro de recomendarlo a mis familiares y amigos pq quedé muy contenta.
Anna SánchezReseña de Google